Las válvulas reductoras de presión (PRV) y los reguladores de temperatura de Armstrong le ayudan a gestionar los sistemas de vapor, aire y líquido de manera segura y eficaz.

Garantizan una productividad ininterrumpida porque mantienen la presión o la temperatura constantes para el control del proceso.


Los gases, los líquidos y el vapor normalmente fluyen a presiones altas a los puntos de uso. En estos puntos, una válvula reductora de presión baja la presión por razones de seguridad y eficacia y para cumplir con los requisitos de la aplicación.

Hay tres tipos de PRV.
• Acción directa. El tipo de acción directa funciona con un diafragma plano o con fuelle. Como es de diseño autónomo, no necesita una línea de detección externa aguas abajo para funcionar.
• Mediante pistón de piloto interno. Este tipo incorpora un piloto y una válvula principal en una unidad. La válvula piloto tiene un diseño similar al de la válvula de acción directa. La descarga de la válvula piloto actúa en la parte superior del pistón y abre la válvula principal.
• Pilotada externamente. En este tipo de válvula los diafragmas dobles sustituyen al actuador del pistón del diseño de piloto interno. Esta gran superficie de diafragma puede abrir una válvula principal más grande, permitiendo una mayor capacidad por tamaño de línea que la válvula que funciona con piloto interno.


Diseñados para trabajar con vapor, agua y líquidos no corrosivos, los reguladores de temperatura autoactivados de Armstrong son unidades compactas de alto rendimiento.

Funcionan de forma muy sencilla y son ideales para una amplia variedad de aplicaciones. Dispone de posiciones flexibles para el montaje del sensor, capilares intercambiables y varios rangos de temperatura que hacen que su instalación, ajuste y mantenimiento sean rápidos y fáciles.


Armstrong ofrece una gama completa de controles de presión y temperatura para vapor, aire y líquidos así como refrigeradores de condensado y separadores de drenaje.